Le conociste hace algunas semanas o meses en un bar y pensaste que te había tocado la lotería. Es guapísimo, divertido y seguro de sí mismo. El sexo es increíble y cuando estáis juntos, lo pasas fenomenal. El problema es que aún no logras entender cuáles son sus intenciones. No sabes si en verdad le interesas o está jugando contigo. ¿Cómo saber? Estas preguntas podrían ayudarte:
¿Rechaza los planes en los que las posibilidades de tener sexo se reducen?
Un jugador difícilmente aceptará quedarse en tu casa el fin de semana que te toca cuidar a tus sobrinos, llevarlos a la feria y hacer fiesta de pijamas con películas. Generalmente prefiere un plan que involucre algunas copas y cama.
¿Te entrega su tiempo a cuentagotas?
Se excusa con reuniones y viajes de trabajo para verte dos o tres días, generalmente de noche y entre semana.
¿No quiere definir qué tipo de relación tienen?
Lleváis varias semanas saliendo pero aún no sabes qué sois. Si lanzas la pregunta, busca cómo evadirla o te da respuestas ambiguas.
¿Habla poco sobre su vida personal, deseos, sueños, etc.?
Si reflexionas al respecto, notarás que le conoces muy poco. No te queda muy claro en qué trabaja, conoces a uno o dos de sus amigos y no sabes cómo imagina su futuro.
¿Se resiste a las muestras de cariño en público?
Si estais en la calle se comporta como un amigo más. No te da la mano ni te abraza. De besos o palabras al oído ni hablemos.
¿Cuida mucho su privacidad online y jamás descuida su teléfono?
Su cuenta en Facebook tiene muchos candados, no puedes ver quiénes son sus contactos o qué publican otros en su muro. Lleva su móvil consigo incluso cuando va al baño y tiene la información protegida con diversas contraseñas.
