La Psicología del Deporte es un campo de actuación consolidado. Los deportistas, olímpicos y no olímpicos, aunque estén sanos como manzanos psicológicamente, pueden beneficiarse de la intervención psicológica. Consiste en la preparación y entrenamiento psicológico y se centra en el constante desarrollo de las capacidades y habilidades psicológicas (no solo hay que entrenar fuerza o velocidad) para mejorar el rendimiento y el buen estado emocional del deportista.
Esta disciplina surgió por la demanda de los propios deportistas y personas relacionadas con el entorno del deporte: entrenadores, familiares, profesores y demás. Está muy relacionada con la Psicología de la Educación y la Psicología de la Salud.
El deportista puede acudir al psicólogo para solucionar un problema o para mejorar su rendimiento. ¿De qué depende el máximo rendimiento de un deportista o equipo? De la combinación de diferentes capacidades:
- Físicas: Fuerza, reacción, resistencia, flexibilidad y velocidad.
- Técnicas: La ejecución en los golpes o movimientos en los diferentes deportes como saque y revés en tenis o golpeo del balón en el fútbol, por ejemplo.
- Tácticas: Como el ataque y defensa en baloncesto o fútbol.
- Psicológicas: Personalidad, motivación, afrontamiento, concentración y confianza entre otros
- Junto con otros factores externos; los otros competidores, terreno de juego o decisiones del árbitro, por ejemplo.
Los deportistas de alta competición, como son los olímpicos, tienen gran apoyo y entrenamiento psicológico ya que es una situación de enorme presión y un segundo determina el éxito o el fracaso.