¿Utilizas la función Sleep de tu televisor para que se apague cuando ya estés durmiendo? ¿Navegas por internet hasta altas horas de la noche? Diferentes estudios han encontrado que estos hábitos pueden afectar la salud seriamente.
Exponernos a la luz durante las horas de sueño puede afectar nuestros horarios de alimentación y provocar que ganemos peso. Investigadores de la Universidad de Ohio State realizaron un experimento con ratones a los que dividieron en dos grupos. Al primero lo expusieron a luz tenue durante las noches y al segundo lo mantuvieron en un ambiente oscuro al dormir. Después de 8 semanas, los roedores del primer grupo ganaron 50% más peso que los otros aún cuando la cantidad de comida que ingirieron y la actividad física fue similar. Estudios anteriores, realizados con humanos, han encontrado que las hormonas encargadas del metabolismo se ven afectadas si la persona se expone a luz durante la noche.
La relación entre dicha exposición y los trastornos del humor ha sido poco analizada, sin embargo un nuevo estudio conducido por neurocientíficos de la Universidad Estatal de Ohio encontró que además puede aumentar las posibilidades de sufrir depresión. Realizado también con roedores, en esta ocasión se concentraron en los cambios en el comportamiento y el cerebro. Después de exponerlos 4 semanas a una luz tenue (con una intensidad igual a la que tiene una pantalla de televisión en una habitación oscura), encontraron que eran menos activos y mostraban menos interés en el agua potable y el azúcar, síntomas que pueden compararse a los que presenta una persona deprimida.
La buena noticia es que estos efectos son reversibles si se inicia un ciclo de luz-oscuridad regular disminuyendo la exposición a la luz artificial durante la noche.