Cuando alguien nos dice que padece un trastorno del sueño, es común pensar que tiene problemas para quedarse y permanecer dormido. Sin embargo, hay personas que también sufren un desorden a pesar de dormir las horas recomendadas e incluso algunas extra. ¿Por qué? Porque dormir de más puede resultar tan contraproducente como privarnos del sueño. Especialmente si sufrimos hipersomnio.

Los síntomas de este padecimiento comienzan a manifestarse de forma gradual. Generalmente aparecen en la adolescencia y suelen incluir:

  • Experimentar cansancio y somnolencia durante el día a pesar de haber dormido toda la noche
  • Dormir siestas durante el día
  • Aumentar las horas de sueño (llegando hasta 15 por día)
  • Sensación de confusión y desorientación al despertar de un largo sueño

Algunos pacientes también experimentan dificultad para pensar con claridad, inapetenciaansiedad y baja energía durante el día. A diferencia de la narcolepsia, en este trastorno no existen episodios de sueño súbitos.

El hipersomnio puede ser síntoma de otros trastornos del sueño que también provocan somnolencia diurna como la apnea obstructiva del sueño o el síndrome de las piernas inquietas. También puede ser consecuencia de una lesión cerebral, hipotiroidismo, abuso de drogas y efecto secundario de algún medicamento.

Si bien los especialistas del sueño recomiendan dormir entre 7 y 9 horas al día, la necesidad diaria varía de persona a persona. Aspectos como la edad, el nivel de actividad física y el estilo de vida, influyen en ello.¿Cuántas horas debes dormir? Las suficientes para sentirte repuesto a la mañana siguiente. Si a pesar de estar 9 horas o más en la cama, te cuesta trabajo despertar y sientes que el sueño no fue reparador, es momento de consultar con un profesional. El hipersomnio puede afectar gravemente tu calidad de vida y volverte más propenso a padecer accidentes. El tratamiento generalmente incluye medicamentos estimulantes y cambio de hábitos.