Hoy toca el turno de hacer una lista de los desaciertos más comunes de los chicos durante el sexo. En el top 5 encontramos:
Ir directo a los pechos/genitales.
¿Sabes cuál es el órgano sexual más grande del cuerpo? La piel. Si quieres atravesar su ropa interior antes de llenarla de besos y caricias por todos lados, puede incluso lastimarla. El juego previo es muy importante para las mujeres ya que tardan un poco más en alcanzar la excitación así que préstale la atención debida y no dejes que salga el adolescente que llevas dentro.
Poner una porno sin preguntarle.
Tal vez las películas XXX te ayudan a alcanzar la excitación, pero, ¿qué tal si a ella le chocan? No olvides que muchas de estas cintas muestran a las mujeres como objetos sexuales y hay chicas a las que no les gustan. Antes de darle play al reproductor, pregúntale si está de acuerdo. Por cierto, este punto aplica también a las cámaras. Antes de decidir guardar un registro audiovisual de su encuentro, consúltalo con ella.
No traer condones.
Ese viejo pretexto de «no se siente igual» no aplica en una época en la que hay condones para todos los tamaños y gustos. Muchas chicas se rehusarán a ir más allá si no tienes protección y nada tan frustrante como quedarte con las ganas. Además, es por tu propia seguridad. Una aventura de una noche puede marcarte de por vida con una infección de transmisión sexual que se convierta en una enfermedad crónica. ¿Vale la pena?
Intentar muchas veces que baje.
Si le insinuaste/pediste que te practicara sexo oral pero aún así se resiste, no te empeñes en convencerla. Hay mujeres a las que no les gusta, les da asco o simplemente les apena. Si accede a hacerlo, cuida tu higiene y no fuerces o sujetes su cabeza ya que podrías agobiarla.
No darle importancia al cierre.
Hay mujeres que aseguran que la parte que más disfrutan del sexo es ese momento de conclusión en que pueden abrazar a su pareja durante un largo rato y disfrutar ese momento de comunión con el otro. Aunque te estés cayendo de sueño, dedica unos minutos a abrazarla, besarla y demostrarle que no eres una máquina sexual y que ese encuentro ha sido significativo.