Si hay un día de la semana que podría catalogarse como la oveja negra de la familia, sin duda es el lunes. En términos generales, la productividad laboral no es la mejor y el humor tampoco. Ni siquiera la música ha tratado bien al día de la luna. Para muestra, Manic Monday de Bangles, I don’t like mondays de The Boomtown Rats o Monday de Wilco. Bueno, al pobre le va tan mal que el que se ha ganado fama como «el día más triste del año», también es un lunes.

Paradójicamente, el lunes es el día que preferimos para poner en marcha nuestros proyectos. Al asociarlo culturalmente con el comienzo de la semana, lo volvemos ideal para otro tipo de inicios. Según un reciente estudio publicado en JAMA Internal Medicine, durante esas 24 horas, hay 25% más búsquedas en Google sobre métodos para dejar de fumar. Además del elegido para abandonar el tabaco, es el que preferimos para empezar la dieta, volver al gimnasio o visitar al doctor.

Tomando en cuenta lo anterior, las universidades Johns Hopkins, Columbia y Syracuse, se unieron a la iniciativa de salud pública The Monday Campaigns. Esta asociación, busca impulsar campañas que promuevan hábitos saludables y prevención de enfermedades, enfatizando la idea del lunes como día del cambio. De los lunes sin carne (proyecto que también fomenta Paul McCartney en su propia fundación) a Monday 2000, que promueve la recomendación de consumir 2000 calorías al día, el lunes intenta dejar su cara fatigosa de lado y posicionarse como la jornada de la salud.

Y tú, ¿hoy comenzaste a cambiar?