Las actividades en exteriores pueden resultar tremendamente benéficas para nuestro bienestar general. Investigadores de la Universidad de Brighton en Reino Unido, realizaron un estudio comparativo entre ejercitarse en un gimnasio y al aire libre. Concluyeron que en el exterior el gasto de energía es mayor ya que factores como la resistencia del viento y las alteraciones en el terreno hacen que el esfuerzo incremente.
Otro estudio inglés, llevado a cabo en la Universidad de Exeter, encontró que los ambientes naturales ayudan a incrementar la sensación de vitalidad. Las personas que realizan rutinas deportivas en ellos, presentan menores niveles de cortisol (la hormona del estrés) y tensión. Esto quizá se debe a que, como ya se ha comprobado en repetidas ocasiones, la exposición a los rayos del sol ayuda a mejorar el ánimo.
No solo el ejercicio dinámico ayuda a experimentar esas mejorías. Un análisis publicado en la revista Environmental Science and Technology, para el que se analizaron datos de 1250 personas, encontró que actividades como caminar, pescar, montar a caballo, la jardinería o las labores de una granja, pueden mejorar el humor y la autoestima en solo ¡5 minutos!
Uno de los trabajos más recientes sobre el tema se llevó a cabo con veteranos estadounidenses. Estos hombres y mujeres son conocidos por experimentar problemas emocionales después de una experiencia tan traumática como lo es una guerra. Sin embargo, realizar actividades en equipo y en exteriores puede marcar una diferencia significativa. La investigación fue realizada por expertos de la Universidad de Michigan, quienes dividieron a los voluntarios en equipos de 6 a 12 participantes. Después de una semana de actividades como montar campamentos o realizar excursiones a pie, los veteranos mostraban mejorías en su funcionamiento social y optimismo frente a la vida.
¿A qué estás esperando? ¡Sal a disfrutar del aire libre!