A veces estamos en un trabajo que no nos hace sentir bien o que no es lo que esperábamos pero tu situación tampoco te deja dejarlo, y lo más probable es que no puedes permitirte ese lujo, pero eso significa que tengas que amargarte la vida o no poner empeño en tus labores. Si no te gusta tu trabajo, estos tips pueden ayudarte a sobrellevarla:

Intégrate.

Muchas veces, cuando vemos el trabajo como una pesada obligación, la idea de quedarte en tu cubículo refunfuñando suena atractiva pero lo cierto es que allá afuera hay un mundo de personas con las que quizá tienes más en común que el lugar de trabajo. Sé amable, sonríe a los demás y verás que tu día a día se aligera pero eso sí, evita…

Quejarte.

Lamentarte con los compañeros de trabajo puede ser muy peligroso, podrías desmotivarlos a ellos y crear un ambiente laborar pesado y es probable que tus habladurías lleguen a oídos de tus superiores (nunca falta el compañero envidioso o cotilla). Si ellos han de enterarse que no estás content@ es mejor que lo escuchen de ti lo que nos lleva a…

¡Habla!

Si ya has detectado qué es exactamente lo que te molesta del trabajo, ¿por qué no intentas charlar con tu jefe sobre el tema? Si tu trabajo es bueno, lo más probable es que te ayude a mejorar algunas cosas para no perderte. Claro que si es un cabeza dura que no entenderá nada y en verdad estás hasta el copete del trabajo, no descuides tus…

Redes sociales.

Cada vez más reclutadores están recurriendo a los perfiles de redes sociales (LinkedIn, Twitter, Facebook) para buscar personas que cumplan con las características que requieren. Ábrete una cuenta y vende tus aptitudes, tal vez encuentres tu trabajo ideal más rápido de lo que creerías.