La excitación es la primera fase de la respuesta sexual humana (las otras tres son meseta, orgasmo y resolución; ya hablaremos sobre ellas en otros artículos) y es la respuesta física ante los estímulos que pueden ir de una fotografía sugerente a una caricia, una palabra al oído, etc. En las mujeres se manifiesta a través de la lubricación de la vagina, la dilatación de la vulva y la erección de los pezones. Es la forma en la que el cuerpo comienza a prepararse para el coito y según científicos de la Universidad de Groningen en Holanda, durante esa etapa las mujeres están dispuestas a realizar cosas que normalmente les parecerían repulsivas.
Los investigadores quisieron averiguar por qué el sexo, que objetivamente parecería algo asqueroso (ya sabes por la combinación de fluidos corporales y olores), nos resulta tan atractivo. Para ello reclutaron a 90 mujeres a las que dividieron en 3 equipos. Al primero le mostraron un vídeo erótico, al segundo uno de deportes extremos y al tercero un clip sobre un tren.
Después pidieron a todas realizar actividades consideradas como repulsivas: beber de un vaso en el que se encontraba un insecto, limpiarse las manos con un pañuelo usado y meter un dedo en una bandeja llena de condones usados. ¿El resultado? Las mujeres que vieron el vídeo erótico fueron las más dispuestas a cumplir las tareas.
Este estudio, aunque pequeño, proporciona una clave sobre la disfunción sexual: si la mujer no está lo suficientemente excitada, es más probable que encuentre repulsivo el acto y comience entonces a evadir los encuentros sexuales.
¿Y qué les excita a ellas?
Mientras a un hombre puede bastarle con una revista en la que aparezcan mujeres sin ropa, a ellas los vídeos de parejas copulando les ayudan a alcanzar la excitación. Para comprobar esto, la psicóloga canadiense Meredith Chivers reclutó a un grupo de voluntarias a las que mostró vídeos y fotografías de hombres y mujeres desnudos y en actos sexuales (tanto heterosexuales como homosexuales) y de bonobos copulando. A través de un pletismógrafo vaginal (que ayuda a medir cambios de presión y volumen), encontró que las imágenes de parejas teniendo relaciones (incluidas las de los primates), fueron las que provocaron mayores niveles de excitación.
Y a ti, ¿qué te excita?