Se llama Richard pero todos lo conocemos como Ringo. Su nombre figura en las listas de los mejores bateristas de la historia y es una leyenda que, junto a sus compañeros de banda, redefinió la música. y quizá, todo ello gracias a la tuberculosis.
Ringo Starr tenía solo 12 años cuando contrajo la enfermedad. Aunque hoy en día los pacientes con tuberculosis son ambulatorios, es decir, no es necesario internarlos, en la época en la que creció era normal que los aislaran. Él tuvo que pasar dos años en un sanatorio. Fue ahí, entre las actividades para entretener a los pacientes, donde encontró al amor de su vida, la batería.
La tuberculosis es una enfermedad causada por la bacteria Mycobacterium tuberculosis, que generalmente afecta a los pulmones. Es la segunda causa mundial de mortalidad causada por un agente infeccioso, a pesar de que es curable y se puede prevenir.
La infección se transmite cuando un enfermo tose, estornuda o escupe bacilos tuberculosos y alguien más los inhala. La Organización Mundial de la Salud estima que una tercera parte de la población del planeta, algo así como 2300 millones de personas, tiene tuberculosis latente, o sea, están infectadas pero la enfermedad aún no se ha manifestado.
Los principales síntomas de tuberculosis son:
- Tos (en ocasiones con sangre).
- Fatiga.
- Pérdida de peso.
- Dificultad para respirar.
- Dolor de tórax.
- Sudores nocturnos.
Los adultos mayores, los niños y las personas con un sistema inmune debilitado, están en mayor riesgo de contraer tuberculosis. El tratamiento generalmente se enfoca en una combinación de fármacos para combatir las bacterias responsables. La mayoría de las veces el pronóstico es positivo.
Y tu, ¿conoces alguien que haya tenido tuberculosis?