Hablamos de ser candidato a las enfermedades del corazón y el boleto del que tendrías que ser poseedor es el llamado Patrón de Conducta Tipo A. ¿Sabes si vas por la vida con este estilo de conducta?

¿Eres un Patrón A?

  • Afán por marcarse y conseguir metas
  • Extrema competitividad
  • Permanente estado de alerta
  • Deseo de reconocimiento
  • Implicación en varias tareas y trabajos al mismo tiempo
  • Realiza todo tipo de funciones, físicas y mentales, de manera apresurada
  • Agresividad
  • Impaciencia
  • Tensión muscular
  • Sensación de estar bajo presión

Si te reconoces en algunos de esos rasgos eres lo opuesto al Tipo B, que se caracteriza por tener un estilo más relajado (por ejemplo puede ser competitivo pero no de forma exagerada o desadaptada como el Tipo A), lo que no quiere decir que no este interesado en aceptar desafíos. El Tipo B también se interesa por los logros y progresar, pero actúa siguiendo el ritmo vital y no luchando en contra del mismo.

Diversos estudios han demostrado la relación del Patrón de Conducta Tipo A con los trastornos coronarios (como infarto o angina de pecho) ; concretamente, la prevalencia de trastornos coronarios en la persona Tipo A es el doble que en la persona Tipo B.

Además de tener este factor de riesgo comportamental, ¿sumas alguno o todos los demás factores de riesgo?;

  • Presión arterial elevada
  • Colesterol elevado
  • Falta de ejercicio
  • Hábito de fumar
  • Consumo de alcohol
  • Dieta desequilibrada

Entonces eres una bomba de relojería. Tienes que plantearte el cambio. Además de los estilos de vida incorrectos, ¿se puede modificar o reducir este estilo de conducta?. Sí, principalmente con entrenamiento psicoterapéutico en técnicas de reducción de ansiedad. Se trata de modificar los componentes fisiológicos, comportamentales y cognitivos asociados al Patrón Tipo A.

Y tú, ¿te pasas al Tipo B?