Una ruptura amorosa puede ser un evento sumamente doloroso. Hay varias fases en el duelo de una relación. La primera de ellas es la incredulidad y le sigue aceptar que la relación se ha terminado.
Se pasa de tener pensamientos como:
«Esa persona todavía me quiere»
«Voy a cambiar para que estemos juntos»
A otros como:
«Se me terminó y ya no hay más qué hacer»
«No me ama lo suficiente»
«Esa relación no funcionaba»
En esta fase tocas fondo, es una etapa de gran sufrimiento. A los sentimientos y emociones iniciales: la ansiedad, incertidumbre y frustración, sobreviene un sufrimiento intenso, como consecuencia de descubrir que ya no está la persona amada y que no volverá. Dependiendo del amor que tenías por el otro, varía el grado de intensidad de los sentimientos dolorosos. En muchos casos, la tristeza es equivalente a la que provoca la muerte de un ser querido.
Si se permanece en esta fase por más de seis meses, es necesario visitar al psicólogo para superar el momento: la tristeza que no cede puede serdepresión.
¡Atentos a la tercera fase! ¡Muy pronto!