Seguro que ya lo sabes, cuando nos sentimos amenazados, nuestro organismo comienza a producir respuestas «automáticas» que nos preparan para luchar o huir dependiendo de la situación. Estas respuestas nos coloca en alerta máxima.
Cuando de ello dependía nuestra supervivencia, estas respuestas se trataban de una reacción de tipo adaptativo pero, en la actualidad, el la vida cotidiana de hoy en día, está ocurriendo precisamente lo contrario, que nos perjudica.
La MEDITACIÓN produce precisamente respuestas contrarias a esa activación extrema, como:
- Menor consumo de oxígeno
- Respiración lenta
- Menores pulsaciones
Mientras que los científicos siguen intentando ponerse de acuerdo en describir o definir este estado meditativo (vigilia relajada, máxima concentración o sueño real), lo que sí es cierto y sabemos es que puede tener muchos efectos beneficiosos. No se puede estar relajado mentalmente y activado fisiológicamente, esto es incompatible. Además, la meditación se utiliza como técnica añadida en distintos tratamientos de algunos trastornos físicos y psicológicos:
- Para afrontar el estrés.
- Para controlar la ansiedad.
- Para disminuir el consumo de alcohol y de drogas.
- Para el control del dolor en algunas dolencias cardíacas.
- Para disminuir la tensión arterial.
- Para superar la depresión.
¿Cómo se puede conseguir entrar en ese estado? Hay muchas maneras de llegar a ellos, bailando o estando quieto, mirando o imaginando un objeto en el que nos concentramos y repitiendo mentalmente o en voz alta una oración, palabra o canción. Tienes que buscar el modo que mejor te ayude a llegar.
Algunas de las prácticas más conocidas para equilibrar mente y cuerpo son:
- Meditación Trascendental: También conocida como Maharishi Mashesh Yogi. Se llevan a cabo dos sesiones al día de entre 15 y 30 minutos. El meditador se sienta, cierra los ojos y se concentra en su «mantra», que es una palabra o pensamiento secreto. Su repetición evita otros pensamientos. También podemos concentrarnos en un objeto cualquiera o en una sensación corporal propia.
- Yoga: Combina posturas, también denominadas asanas, relajación muscular y respiración abdominal. El más conocido es el Hatha Yoga pero hay muchas variantes, entre ellas, el Mantra Yoga. Dicen que quien lo prueba, repite. ¿Te animas?
Y tú, ¿Te apuntas a la Calma Total?