Las mujeres debemos acudir a un ginecólogo una vez que llega la primera menstruación. Ese médico, especialista en el sistema reproductor femenino, es el que detecta enfermedades como dismenorrea (dolor durante la menstruación), incontinencia urinaria y distintos tipos de cáncer (de seno, cérvicouterino, de vagina). Es también un especialista en las enfermedades de transmisión sexual, sin embargo, en muchas ocasiones, ese tema no se toca durante las consultas.

Una reciente investigación de la Universidad de Chicago, realizada con 1154 ginecólogos y obstetras, encontró que solo el 40% hablaba con sus pacientes sobre problemas sexuales y únicamente el 29% sobre los niveles de satisfacción con su vida sexual.

La sexualidad es un aspecto vital de los seres humanos y muchas veces por diferentes tabúes no charlamos sobre ella. Es muy importante tener una buena comunicación con el especialista que nos trata.

Sería aconsejable que generar tal confianza con tu ginecólogo que te sintieras bien hablando de tu orientación sexual, frecuencia de las relaciones, presencia o ausencia de dolor durante el sexo, nivel de lubricación, etc.

Si tienes cualquier duda o malestar, por tonto que te parezca o leve que sea, pregunta habla con tu ginecólogo una vez descartado un problema físico te puede recomendarte ir a un a sexólogo o psicólogo dependiendo aspecto que necesite ser tratado.

Si te da vergüenza hablar sobre tu intimidad sexual con un hombre puedes elegir una ginecóloga, es importante que te sientas bien si no te gusta como te ha tratado o simplemente sientes que no puedes comunicarte bien con tu especialista visita a otro. No pares hasta que te sientas lo suficientemente en confianza.  Recuerda que tú eres responsable de tu salud y de tu sexualidad.