Este tipo de amigo, si lo puedes llamar así, no solo no lo es sino que en casos extremos puede convertirte en tu peor enemigo. Entre este tipo de amistades están las que te usan como un escalón para subir más alto. Pero las verdaderamente destructivas son las que te envidian. Ahí tienes el enemigo dentro de casa.
Hay ciertos amigos que simplemente quieren algo de ti pero no necesariamente tienen sentimientos negativos hacia ti. Por ejemplo, algunos te quieren porque tienes un buen círculo de amigos, tú le das igual pero lo que tienes a tu alrededor no. Puede que les guste como pasas tu tiempo libre o puede ver a tus amigos como contactos para crecer laboralmente. Estos son fáciles de detectar porque a los dos días de conocerte, ya están interaccionando con tus amistades más cercanas como si fueran sus “BFF”, mejores amigos para siempre. Hay una serie de señales que te pueden advertir de este tipo de amigos.
- Quiere conocer rápidamente a tus amigos, consigue sus teléfonos e incluso se hace amigo de todos ellos en la redes sociales.
- Si hay una persona que es el contacto de “oro”, acaba teniendo un trato mucho más cercano con esa persona olvidándose prácticamente de ti. Incluso algunos, al mes de haber conocido a tu grupo de gente, empiezan a prescindir de ti.
- Cambia de conducta, si antes quedaba contigo para ir a un sitio ya queda allá donde está tu círculo social.
- Dependiendo del grado, esas personas pueden acabar de BFF con uno de tus amigos, prescindiendo de ti y agarrándose a la presa que más le interesa para lo que necesita en ese momento.
- No te extrañe si al final esa persona acaba hablando mal de ti, recuerda que ya representas más un estorbo y eres la única persona que conoces sus cartas y sobre todo, ya le diste lo que quería.
Aunque tú eres un escalón para esa persona y una vez que ha llegado más alto se olvida de ti. Hay una variante de este tipo de amigos o mejor dicho se dicen tus amigos pero que se delatan pronto porque te piden rápidamente el gran favor.
«¿Me puedes recomendar para este trabajo?»
«¿Me puedes presentar a esta persona?»
En la mayoría de los casos este tipo de personas no llegan a ser grandes amigos porque tienen demasiada impaciencia para conseguir sus objetivos y el daño que te pueden representar en términos emocionales es mucho menor.
Por otra parte hay gente que se acerca a ti, de una manera profesional, para hacer networking y conocer gente dentro de tu ámbito laboral y nos podemos sentir dolidos. La realidad es que somos nosotros los que los malinterpretamos y confundimos relaciones laborales cordiales con amistad.