Las luces están apagadas, el silencio reina en la sala está y de pronto, durante una escena tremendamente conmovedora, empiezan a escucharse sollozos, narices fluyendo y uno que otro suspiro. Así es, la mayoría de los espectadores ha comenzado a llorar en el cine. Pero ¿por qué lloramos con las películas? 

Diversos especialistas han analizado el fenómeno y una de las respuestas que han encontrado es que la empatía es una de las causas que provoca el llanto. Contactar con los sentimientos del otro (aunque sea a través de una ficción) nos permite entenderlos, una habitación oscura nos hace centrarnos prácticamente al 100% en los personajes lo que hace que sea más probable que lloremos o riamos más cuando vemos cine que cuando vemos televisión.

Otro análisis más elaborado, llevado a cabo en la Universidad de Portsmouth en Reino Unido, concluyó que la combinación de 4 factores puede producir una experiencia emocional intensa:

  • Nivel de tristeza general en la cinta
  • Cuántas veces lloran los protagonistas
  • Qué grado de felicidad experimentan los personajes
  • Qué tan positivo es el mensaje de la película

El estudio también reveló que la calidad de la imagen tiene relación con la emotividad que pueden producir los filmes, (otra razón más para no comprar piratería).

Aunque en términos generales no nos gusta llorar, hacerlo es bueno para nuestra salud emocional. El llanto limpia los lagrimales, hidrata los ojos y libera endorfinas hormonas que nos ayudan a disminuir los niveles de angustia y estrés y son un calmante natural que nos lleva a la relajación.

Llorar es una actividad que hombres y mujeres hacemos de forma distinta. Según la Sociedad Alemana de Oftalmología, después de los 13 años, las mujeres lloramos cuatro veces más que los hombres y cuando lo hacemos solo el 6% de ellos rompe en sollozos, mientras que en nosotras sube al 65%.

Te dejo el trailer de «Diario de una pasión«, una de esas cintas que le sacó lágrimas a más de uno.