Seguro que entre tus 1400 amigos íntimos de Facebook, hay alguien que, sin ser muy agraciado físicamente, tiene tantas fotos de perfil como la cantidad de ángulos que alcanzan los brazos para un selfie. Muy probablemente también conozcas alguien que, siendo muy guapo/a, no comparte fotos de su rostro y elimina las etiquetas si alguien más lo hace.
El autoconcepto (pensamientos, imágenes y sentimientos que tenemos sobre nosotros mismos), es dinámico y cambia positiva o negativamente con las nuevas experiencias. Se construye tomando en cuenta diversos aspectos, por ejemplo:
- Valoración de aspectos a los que damos importancia como la apariencia física, la capacidad intelectual, los talentos, etc.
- Asimilación de la opinión de los demás sobre nosotros.
Vivimos en una sociedad que concede mucha importancia a la apariencia física. Los cánones de belleza que establecen los medios de comunicación nos indican los modelos a seguir. No hay que olvidar que esos cuerpos no son reales y que no todos podemos llegar a lucir así. Lacomplexión física de cada quien es diferente y en ocasiones, por mucho que hagas dieta y te esfuerces, es imposible que luzcas como las personas que ves en la televisión y las revistas. Claro que cuidarnos está bien y hay veces que por salud es sano perder algunos kilos, pero lo importante es que no te obsesiones con ello, vayas a tu propio ritmo y sobre todo te aceptes.
Algo que no debes olvidar:
- No minimices los halagos ni magnifiques las críticas.
- Eres un ser único, no eres perfecto y necesitas identificar áreas en las que puedes mejorar.
- Eres irrepetible. Quiérete mucho que nadie más lo hará por ti.
¿Cómo está tu autoconcepto?