El 98% de las personas necesita entre 6 horas y 8 horas de sueño al día para descansar, para poder recuperarse por completo y para acumular energías para la siguiente jornada. Existe una pequeña élite de sujetos, que no supera el 3% de la población, que puede sobrellevar hasta 20 horas de vigilia sin la necesidad de consumir estimulantes y con una claridad mental muchas veces sorprendente. Son los llamados short sleepers.
Un estudio realizado en la Universidad de California-San Francisco en los Estados Unidos de América, concluyó que existe una variación en el gen DEC2 que provoca que ciertas personas puedan dormir 6 o menos horas al día sin sufrir los estragos típicos de la falta de sueño. ¡Qué suerte! Otro estudio, de la Universidad Ludwig-Maximiliams en Alemania, encontró que los sujetos que tienen dos copias de una variante del gen ABCC9, duermen menos tiempo del normal. Ambos estudios se llevaron a cabo con humanos y con animales, lo que podría comprobar que se trata en efecto de una alteración genética.
Algunas de las características comúnmente presentes en los short sleepers son:
- Tienen una complexión delgada.
- Su metabolismo es acelerado.
- Presentan una mayor tolerancia al dolor.
- Cuentan con mayor positivismo.
En una época como la nuestra, en la que la velocidad de los canales de comunicación es sorprendente y cada vez se requiere más que los individuos permanezcan disponibles las 24 horas del día, las personas de sueño corto pueden verse como privilegiados y en parte lo son pero como ya dijimos por una cuestión genética. Existen muchas personas y compañías que ofrecen diversos métodos para reducir las horas de sueño al día. Si lo intentas con alguno de ellos, sin asesoría médica confiable, podrías padecer las consecuencias de la privación del sueño como lo son los mareos, las migrañas, la depresión, los accidentes, la confusión, los problemas de memoria y un sinfín de complicaciones más. ¿Te quieres arriesgar?
¿Conoces algún short sleeper? ¿Tú lo eres?