Hace apenas unos días nos informaron de la triste noticia del fallecimiento de Xavier Ortiz, actor y cantante que alcanzó su momento de mayor popularidad a inicios de la década de los 90 como parte del grupo musical Garibaldi. Finalmente se confirmó que Ortiz se había suicidado, algo que impactó tanto en sus fans como en el mundo del espectáculo. 

No hay nada más duro que perder a un ser querido que decide suicidarse.  Muchos se sienten responsables por no impedirlo, pueden estar años y años siendo corroídos por los hubieras y con un tremendo sentimiento de culpa al creer que podrían haber hecho algo para evitarlo. El suicidio está estigmatizado socialmente, parece como si solo se suicidara gente lejana a nosotros y lo cierto es que mientras que la depresión aumente, habrá cada vez más personas que vean la muerte como la única salida para acabar con su dolor.

En el mundo este padecimiento es la segunda causa de muerte entre los jóvenes y las cifras se siguen elevando.  Detrás de estas frías estadísticas se esconde el sufrimiento de muchos familiares a quienes les cuesta entender cómo pudo haberse quitado la vida su ser querido, -¿por qué?-  se preguntan y seguramente la respuesta es: por depresión.

El suicidio es una de las peores consecuencias de la depresión. Cada vez más personas acaban con su vida y estos números no disminuirán si no cambiamos nuestra manera de entender este acto y lo vemos como un resultado del padecimiento. Cuando alguien sufre de depresión ve la muerte como la única salida, pero curiosamente los que están más graves se suicidan menos porque no tienen la energía para llevarlo a cabo. Es cuando empieza a haber una ligera mejoría se debe estar más atento, ya que pueden tener mayor energía para consumarlo. La realidad es que es muy difícil de prevenir y la principal causa de que alguien se suicide está asociada a una enfermedad mental.  Si estás leyendo esto y un ser querido se quitó la vida, por favor, no te culpes.

Si has vivido el suicidio de una persona querida es importante que acudas al psicólogo, los sentimientos de culpa y rabia deben ser canalizados o podrían afectar muy negativamente a ti y a tus seres queridos. Para tu consuelo, porque muchos se culpan de no haberlo evitado, la persona que quiere suicidarse muchas veces lo esconde a tal grado que hasta engaña a su terapeuta.

De todas formas, si un ser querido hace comentarios relacionados con el poco valor de la vida, su inutilidad o planteamientos sobre que el mundo estaría mejor sin él/ella, se tienen que tomar muy en serio y no quitarles importancia. Lo mejor es aceptar su sufrimiento y tratar de convencerlo de que va a salir del mismo si es ayudado por especialistas.