Algo parecido a lo que pasa con la depresión ocurre con el trastorno bipolar, el nombre se utiliza indiscriminadamente como sinónimo de inestabilidad emocional. Esto provoca muchos malentendidos ya que se trata de un padecimiento realmente grave, que en riesgo a aquel que lo sufre y en un estado de gran vulnerabilidad a las personas que están a su alrededor.
Un trastorno bipolar, antes llamado psicosis maníaco depresiva, es una alteración del ánimo en la que la persona alterna dos estados emocionales completamente opuestos. Un episodio maníaco en el que tiene una extrema activación, motivación y positivismo y otro donde el paciente sufre depresión mayor.
Dentro del espectro de os trastornos bipolares distinguimos el de tipo I, el tipo II y la ciclotimia. Salvo para ciertos pacientes con ciclotimia, e resto siempre necesita de tratamiento farmacológico y el peso del psiquiatra en esta terapia es mayor que el del psicólogo. El papel de este consiste en aplicar ciertas técnicas en psicoterapia, apoyar a la familia y trabajar aspectos relacionados con la mejor comprensión de esta enfermedad, su aceptación y cómo identificar rápidamente cuando su familiar entra en un episodio maníaco o depresivo, además de prevenir complicaciones:
Mi hijo nos arruinó, se gastó todos nuestros ahorros en una inversión completamente irracional. El psicólogo nos hizo comprender que lo había hecho porque estaba en el episodio maníaco. No era consciente de lo que hacía, entendí lo que le pasaba y dejé que regresara a casa. Quizá ahora soy yo quien más lo apoyo.
Madre de paciente bipolar
El diagnóstico de esta enfermedad lo suelen hacer los psiquiatras, pero no hay un test, alguna prueba física o análisis de sangre que pueda detectar el trastorno bipolar. La observación, la entrevista clínica al paciente y a sus familiares y sobre todo si informan que han vivido un episodio maníaco son lo que nos llevará a un diagnóstico de bipolaridad. Es más fácil diagnosticar un bipolar tipo II ya que en este casi cursan episodios de hipomanía o episodios maníacos más débiles y sólo acuden al médico cuando están en un episodio depresivo.
Las causas de un trastorno bipolar pueden ser variadas y todavía no hay una teoría lo suficientemente robusta que nos explique exactamente por qué aparece. Se sabe que si tienes antecedentes familiares en padres y hermanos hay una mayor probabilidad de sufrirlo, pero por otra parte, hay mucha gente que lo padece sin tener a nadie cercano que lo padezca también.