Todos los días, todos los minutos, repetimos automáticamente acciones como respirar o parpadear. Esto último es necesario porque debemos mantener humectado el ojo. Cada vez que el párpado se cierra, la superficie del ojo
Todos los días, todos los minutos, repetimos automáticamente acciones como respirar o parpadear. Esto último es necesario porque debemos mantener humectado el ojo. Cada vez que el párpado se cierra, la superficie del ojo